La Coronilla de la Divina Misericordia es una devoción de la Iglesia católica, fundada en las revelaciones que recibió santa Faustina Kowalska (1905-1938), religiosa polaca, sobre la Misericordia de Dios. La Coronilla consiste en un conjunto de oraciones, comúnmente rezadas con ayuda de un rosario, pero puede hacerse sin él.
Santa Faustina Kowalska escribió en su diario unas promesas de Jesús en relación a la coronilla. Jesús le dijo que a quien la rece, la misericordia le protegería en la vida y se le otorgaría inmensas gracias; y que fuera recomendada como última tabla de salvación.
Es necesario disponer el corazón a Jesús, solicitar su misericordia por el perdón de nuestros pecados y los pecados del mundo entero.
1- Iniciamos con la señal de la Cruz: Por la Señal de la santa Cruz de nuestros enemigos líbranos Señor Dios nuestro. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
2- Oración inicial: Expiraste, Jesús, pero la fuente de vida brotó para las almas y el mar de misericordia se abrió para el mundo entero. Oh fuente de vida, insondable Misericordia Divina, abarca al mundo entero y derrámate sobre nosotros.
3- Padre nuestro: Padre nuestro que estás en el Cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino; hágase tu voluntad en la Tierra como en el Cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas como nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal. Amén.
4- Ave María: Dios te salve María, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita eres entre todas las mujeres y bendito el fruto de tu vientre Jesús.
Santa María, madre de Dios ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
5- Credo de los Apóstoles: Creo en Dios padre todopoderoso, creador del Cielo y de la Tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor; que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen; padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado; descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos; subió a los Cielos y está sentado a la diestra de Dios, Padre todopoderoso, desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos.
Creo en el Espíritu Santo; la Santa Iglesia Católica, la Comunión de los santos; el perdón de los pecados, la resurrección de la carne; y la vida eterna. Amén.
6- Padre eterno: Padre eterno, te ofrezco el cuerpo, la sangre, el alma, y la divinidad de tu amadísimo Hijo, nuestro señor Jesucristo, como propiciación de nuestros pecados y los del mundo entero. (Esta oración se recita en la cuenta grande del rosario (en vez de Padre nuestro)
7- Recitar diez veces con las cuentas del rosario en vez del Ave María: «Por su dolorosa pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo entero». (En cada misterio del rosario, se recita la jaculatoria en las cuentas pequeñas del rosario en vez del Ave María).
8- Oración: «Oh sangre y agua que brotaste del corazón de Jesús, como una fuente de misericordia para nosotros, en ti confío. ( Se repite al terminar las 10 repeticiones de las jaculatorias).
9- Al terminar las 5 decenas: Recitar en el medallón del rosario la doxología tres veces.
Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal; ten piedad de nosotros y del mundo entero.
10- Oración final: «Oh Dios eterno, en quien la misericordia es infinita y el tesoro de la compasión inagotable, míranos bondadosamente y aumenta en nosotros tu misericordia, con el fin de que, en los momentos difíciles, no nos desesperemos ni nos desalentamos, sino que, con la máxima confianza, nos sometamos a tu santa voluntad, que es el amor y la misericordia mismos. ¡Amén!
Aquí te dejamos el video de Cómo rezar la coronilla de la Divina Misericordia, para que puedas ayudarte de manera visual. ¡Te recomendamos que la hagas diariamente a las 3:00 de la tarde.